Cuanto puede impactar ambientalmente el proyecto Equinor en Tierra del Fuego

Actividades offshore en Argentina

Equinor tiene participaciones en una licencia de exploración y un bloque productor en la prolífica formación Vaca Muerta, en la provincia de Neuquén.

Los recursos de petróleo y gas no convencionales de Argentina se encuentran entre los más grandes del mundo. Vaca Muerta es una formación geológica de la cuenca neuquina de 30.000 kilómetros cuadrados que contiene petróleo y gas a más de 2.500 metros de profundidad. Equinor es socio de las licencias Bandurria Sur y Bajo del Toro.

Equinor obtuvo la licencia en 2020 y posee una participación no operada del 30%. YPF como operador tiene una participación del 40% y Shell, como socio no operado, posee el 30% restante.

El bloque se encuentra en la fase inicial de desarrollo con una producción actual de alrededor de 25.000 barriles de petróleo equivalente por día de 50 pozos productores. Cubre alrededor de 228,5 kilómetros cuadrados (56.000 acres) ubicados en el área central del prolífico yacimiento Vaca Muerta. El desarrollo futuro incluye la perforación de 300 a 500 pozos adicionales y la construcción de una instalación central de procesamiento de petróleo con una capacidad de 75.000 barriles de petróleo por día.

Impactos ambientales del proyecto de Equinor en Tierra del Fuego

El proyecto de exploración sísmica de Equinor en Tierra del Fuego ha suscitado un debate sobre sus posibles impactos medioambientales.

Los posibles impactos incluyen

Contaminación acústica: las explosiones sísmicas podrían afectar a la fauna marina, en particular a mamíferos y aves que dependen del sonido para comunicarse, navegar y alimentarse.

Riesgos para la pesca: el ruido puede alterar el comportamiento de los peces y afectar a las actividades pesqueras locales.

Vertidos de petróleo: aunque poco probable, un vertido accidental de combustible o petróleo durante las operaciones podría tener graves repercusiones en los ecosistemas marinos.

Alteración del hábitat: la instalación de equipos y la actividad sísmica podrían perturbar el lecho marino y afectar a las comunidades bentónicas.

Medidas paliativas:

Equinor ha presentado una Evaluación de Impacto Ambiental (EIA) en la que se describen medidas para minimizar los impactos, entre ellas

• Utilización de tecnologías de bajo impacto
• vigilancia ambiental durante las operaciones
• planes de contingencia en caso de vertidos.

Controversia:

 Críticas a la EIA: algunos sectores critican la falta de información detallada en la EIA, sobre todo en relación con los posibles impactos a largo plazo.

Grupos ambientalistas critican el proyecto por representar amenazas a los ecosistemas marinos, particularmente en áreas sensibles como Tierra del Fuego. 

Es importante que el público tenga acceso a información veraz y pueda participar en el debate sobre este importante tema para el futuro de Tierra del Fuego. 

El proyecto de Equinor presenta riesgos ambientales potenciales que deben ser cuidadosamente evaluados.

Es necesario un debate público abierto y transparente sobre los beneficios y riesgos del proyecto antes de tomar una decisión definitiva.