Un recorrido por los icónicos paisajes que ya no existen y las razones detrás de su pérdida.

A lo largo de la historia, la Tierra ha revelado paisajes de belleza asombrosa que cautivaron a la humanidad con su esplendor único. Sin embargo, el inexorable paso del tiempo, junto con la erosión, la actividad humana y el cambio climático, ha transformado o borrado muchos de estos emblemas naturales. National Geographic ha destacado algunas de las maravillas que han dejado de existir, subrayando la fragilidad de nuestro entorno y la necesidad urgente de conservación.

1. Playa de Legzira, Marruecos

La Playa de Legzira en Marruecos era famosa por sus imponentes arcos rocosos, esculpidos por siglos de erosión. Sin embargo, en 2016, uno de estos arcos colapsó, marcando el fin de una de las vistas costeras más icónicas del país. Aunque el arco ya no se alza, su caída resalta la efímera belleza de la naturaleza.

2. Arrecife de Coral de la Isla de Navidad, Australia

Este vibrante ecosistema marino en el océano Índico ha sufrido gravemente por el blanqueamiento de corales, exacerbado por el aumento de temperaturas causado por El Niño. La salud del arrecife sigue en peligro, poniendo en riesgo a las especies marinas y a las comunidades que dependen del turismo.

3. Parque Nacional Marino de los Doce Apóstoles, Australia

Las formaciones rocosas del Parque Nacional Marino de los Doce Apóstoles, conocidas por su impresionante paisaje costero, han sido erosionadas con el tiempo. La caída de dos de estos apóstoles en 2005 y 2009 redujo su número, pero el parque sigue atrayendo visitantes con sus majestuosos restos.

4. Arco de Darwin, Islas Galápagos, Ecuador

En 2021, el Arco de Darwin, un icónico puente natural de roca volcánica en las Islas Galápagos, colapsó. Este colapso representa una pérdida significativa para el ecosistema local, aunque el archipiélago continúa siendo un refugio crucial para la biodiversidad.

5. Escalón de Hillary en el Monte Everest, Nepal

El Escalón de Hillary, una característica desafiante del Everest, desapareció tras un terremoto en 2015. A pesar de su desaparición, sigue siendo un símbolo de las épicas ascensiones al Everest y de la tenacidad de los alpinistas.

6. Islas Salomón

El aumento del nivel del mar ha puesto en grave peligro a las Islas Salomón, con varios islotes ya sumergidos en 2016. Este fenómeno no solo amenaza la existencia física de las islas, sino también a las comunidades que viven en ellas.

7. Glaciar Chacaltaya, Bolivia

El Glaciar Chacaltaya, uno de los glaciares más antiguos de América del Sur, se declaró extinto en 2009 tras perder casi toda su masa. Su desaparición subraya los efectos del calentamiento global en los ecosistemas montañosos.

8. Mar Muerto, Israel, Cisjordania y Jordania

El Mar Muerto, conocido por su alta salinidad, ha disminuido alarmantemente en las últimas décadas debido a la reducción del caudal del río Jordán y la explotación intensiva. Este descenso ha provocado la formación de sumideros y afectado a los ecosistemas locales y a las comunidades cercanas.

9. Ventana Azul, Malta

La Ventana Azul, un arco de piedra caliza que adornaba el mar Mediterráneo, colapsó en marzo de 2017. Aunque ya no está presente, su caída ha incrementado la conciencia sobre la fragilidad de las formaciones rocosas y la necesidad de preservarlas.

10. Plataforma de Hielo Larsen C, Antártida

En julio de 2017, un iceberg de aproximadamente 5,800 kilómetros cuadrados se desprendió de la Plataforma de Hielo Larsen C, revelando un hueco significativo. Este evento destaca las preocupaciones sobre el cambio climático y sus implicaciones para el nivel del mar y los ecosistemas marinos y continentales.
Estas maravillas naturales, que una vez deslumbraron al mundo, nos recuerdan la urgencia de tomar medidas para proteger nuestro planeta frente a las fuerzas destructivas que amenazan su integridad.

Fuente: infobae.com