Lagarto gigante de Gran Canaria al borde de la extinción: joya de la biodiversidad amenazada

El lagarto gigante de Gran Canaria, un icónico reptil endémico de la isla, ha sido reclasificado como en peligro crítico de extinción por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). Esta alarmante noticia enciende las alarmas sobre la urgente necesidad de proteger este tesoro de la biodiversidad canaria.

Según la evaluación de la UICN, las cuatro especies de lagartos gigantes de Canarias, incluyendo el de Gran Canaria (Gallotia stehlini), se encuentran en grave peligro de desaparecer. Los principales culpables de esta situación son los gatos feral, la culebra real de California, ambas especies invasoras, y la constante presión ejercida por las actividades humanas.

El lagarto gigante de Gran Canaria, que puede alcanzar hasta 80 centímetros de longitud, ha sido históricamente una parte crucial del ecosistema insular. Sin embargo, su población ha disminuido drásticamente en las últimas décadas debido a la depredación, la competencia por recursos y la pérdida de hábitat.

La culebra real de California, introducida accidentalmente en la isla en la década de 1970, se ha convertido en un feroz depredador del lagarto gigante. Su rápida propagación y voraz apetito han diezmado las poblaciones de lagartos, especialmente en las zonas de menor altitud.

Los gatos feral, también introducidos por humanos, representan otra amenaza significativa. Estos felinos cazan lagartos gigantes tanto adultos como juveniles, lo que dificulta la reproducción y la recuperación de las poblaciones.

La actividad humana, a través de la expansión urbana, la agricultura y el desarrollo turístico, también ha fragmentado y destruido el hábitat natural del lagarto gigante. La pérdida de refugios y zonas de alimentación ha dejado a los lagartos más expuestos a la depredación y a las condiciones climáticas extremas.

La reclasificación del lagarto gigante de Gran Canaria como en peligro crítico de extinción es un llamado urgente a la acción. Se requieren medidas drásticas para proteger a esta especie emblemática y garantizar su supervivencia. Las autoridades locales, las organizaciones conservacionistas y la comunidad en general deben trabajar en conjunto para implementar estrategias efectivas de control de las especies invasoras, restaurar el hábitat natural del lagarto y educar al público sobre la importancia de su conservación.

El futuro del lagarto gigante de Gran Canaria pende de un hilo. Sin acciones urgentes y concertadas, esta joya de la biodiversidad canaria podría desaparecer para siempre. Es nuestro deber proteger este tesoro natural para las generaciones presentes y futuras.